En 2017, cuando la reforma del gobierno de Bachelet II entraba en plena vigencia, la base imponible del impuesto de primera categoría se redujo en las empresas no mineras. Como porcentaje del PIB no minero, la base imponible disminuyó en 3 puntos, desde 20,5% a 17,5% en 2017. Expertos alertan del riesgo de que con la nueva reforma del actual gobierno vuelva a bajar la base tributaria.